viernes, 2 de marzo de 2012

Los que se buscan a sí mismos

Primera escena: el comienzo del fin

Rather than love, than money,
than fame, give me truth.”
Chris McCandeless citando a Thoreau.

El cuerpo alado espera en un local estadounidense de comidas rápidas situado en un aeropuerto ruso su vuelo número 275 cuyo destino final es la ciudad italiana de Roma. El cocoliche de la globalización modelo siglo XXI. Su vuelo sale en una hora. Será su ante último vuelo en esta historia que aquí, unilateralmente, se convino en llamar el viaje, el camino. El cuerpo alado ahora está solo, sus compañeros de viaje siguieron otros rumbos, arrastrados por otras tierras, ávidos de otros desafíos. Él sabe ahora que debe juntar las fuerzas necesarias para ir lentamente transitando el camino de retorno a casa. Geográficamente el retorno está a punto de comenzar, el vuelo toma su indefectible rumbo sur. Espiritualmente también, el cuerpo alado, al tiempo que su estomago se llena, siente como su alma se va llenando de igual modo. El camino fue una vía metálica por momentos, pesada, dura, puntual y precisa por otros. Aviones, barcos, metros y buses jamás estuvieron mejor llamados medios de transporte. El medio de transporte viajando en medios de transporte. El cuerpo alado parece satisfecho, saciado, extasiado, parece renovado y un tinte claro y brilloso en su mirada así lo demuestra. Su cuerpo es liviano como el aire, sus alas están desplegadas. Se prepara para volar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario